
Muchos pasan la vida buscando la fuente de la juventud y si existe una fuente de la juventud. Millones de personas ya la descubrieron – el secreto para sentirse mejor y vivir más tiempo. Se llama actividad física. Encontrar un programa que funcione para usted y seguirlo puede rendirle enormes dividendos. El ejercicio habitual puede prevenir o demorar la aparición de diabetes y problemas cardíacos. También puede reducir el dolor de la artritis, la ansiedad y la depresión. Puede ayudar a que las personas mayores sean independientes.
Existen cuatro tipos principales de ejercicios y las personas mayores necesitan un poco de cada uno:
- Actividades de resistencia – como caminar, nadar o andar en bicicleta – que desarrollan resistencia y mejoran la salud del corazón y el sistema circulatorio.
- Ejercicios de fortalecimiento, que desarrollan tejido muscular y reducen la pérdida muscular relacionada con la edad.
- Ejercicios para estirar los músculos, para mantener el cuerpo ágil y flexible.
- Ejercicios de equilibrio para reducir las posibilidades de sufrir una caída.
- Recuerde siempre consultar con su médico.
Fuente.: Instituto Nacional sobre el Envejecimiento